Blogia
DIÁLOGOS POSTMODERNOS

RADIOHEAD EN MÉXICO: La propia epifanía

RADIOHEAD EN MÉXICO: La propia epifanía

 

La previa

Después de meses, semanas y días de rebatiñas para conseguir boletos para el concierto, terapias de desensibilización sistemática, reservaciones de hotel y de andar cazando ofertas para vuelos de avión;  el domingo en la mañana está todo listo para comenzar la aventura bautizada por Wilberth Herrera como Jigsaw falling into D.F.

 

Justo a tiempo

5:40 p.m. Un avión despega con dificultades del aeropuerto de Mérida, con destino al Distrito Federal.  7:35 p.m. aterriza el avión que trae consigo a los cuatro últimos en llegar a la cita del concierto de Radiohead.  Paciencia, aún falta el hotel y luego la peregrinación hasta el Foro Sol. Apenas hace el avión contacto con tierra comienzan a llegar mensajes de texto para hacer aún más emocionante el momento. Emilio, quien estaba en el lugar del evento desde las 2 de la tarde, pregunta con preocupación: “¿llegaron?” y un insolado Omar, después del Pumas-Atlante, insiste “¿Dónde andan? Nosotros estamos yendo al Foro”. -Nosotros bajando del avión- le respondo.  A su vez,  un impaciente Ericel nos hace saber que nos está esperando en el hotel.

8:20 p.m. Una vez pasada la permeable aduana de la seguridad del OCESA, unos acordes que parecen ser los mismos de “Quen pompó” nos recibieron mientras encontrábamos nuestros lugares. Realmente se trataba de “TransEurope Express”, de Kraftwerk, emblemáticos pioneros de la música electrónica quienes ya tenían un rato de haber comenzado con el recorrido sonoro y visual de la historia del grupo.  Curioso detalle que incluyeran en su repertorio  material de cuando se encargaron de hacer el tema oficial de el Tour de France en su edición de 1983. Alcanzamos a ver y escuchar además  “Radio Activity” y “The Robots”. Debo decir que aún al más exigente seguramente Kraftwerk le hizo amena la espera para el momento importante de la noche.

8:55 p.m. Finaliza Kraftwerk su actuación. Dando paso al intervalo con un reggae para algunos  “minimalista” que no me desagradó en lo absoluto. Quizá porque por momentos me recordó a The Police, pero sin voz. Quizá por la buena vibra que se percibía, o por el buen humor de saber que se está a punto de compartir con personas muy importantes el concierto de la banda que nos había reunido para estar ahí. Reggae es alegría, es buen humor, es sinónimo de pasársela bien.  Con todo y que eso suene a comercial de cerveza. No fue coincidencia que la ola humana se levantara de ida y vuelta una y otra vez por las gradas de todas las secciones.

 

Primer round

9:30 p.m.  Se apagan las luces. Desde nuestra sección, naranja B (lejos, muy lejos), es difícil siquiera adivinar qué pasa en el escenario. No importa; las primeras notas de “15 step” lo borran todo, se acaba el reloj, inicia la catarsis total. “Es 15 step, es 15 step” les digo a quienes me acompañan en ese momento. Dos fanáticos de la banda a lado de mí se quedan viendo con cara de “¿De verdad? No me digas”. De inmediato, Gabriela toma el celular para informarles a quienes en ese momento se encontraban en otro lugar -en el concierto de Anneke- y que habían postergado Radiohead para la segunda noche.

“Airbag” sorprende como segundo tema haciendo subir aún más la intensidad. Yorke y compañía han decidido arrancar con fuerza y cimbrar el Foro Sol tras 15 años de ausencia. Con “There, there”  y “All I need” comienza a vislumbrarse la intensidad y los cambios de ritmo y  emociones que van a provocar a lo largo del concierto. Las luces y colores en el escenario ayudan a hacer juego completo de la experiencia.  “¡Jonny, Jonny!” corean los de adelante. Emilio jura que  hicieron sonrojar a Jonny Greenwood.

Mención aparte merece “Nude”; ejecución magistral, puso a más de uno con el corazón en la mano, “esa canción te hace amar a quien hace unos minutos odiabas”, comenta una asistente al concierto. Una Luna roja parece asomarse entre la nublada noche.

 

Rio3 por ti.

 

“Weird fishes”, de las más coreadas. Ya aquello era una fiesta; el público estaba a merced de los ingleses, no era para menos.

“National Anthem” hace ponerse de pie a todos, incluso a quienes les empezaba a hacer estragos la insolada del juego de Pumas o la espera de horas antes del concierto. Aunque esta ejecución fue superada un día después al incluir en esta misma canción sampleos (otros más fans dicen que bajaron una señal de radio en vivo).

“Faust  Arp” de nuevo nos vuelve a poner a todos melancólicos suspirantes para que posteriormente se oiga una ovación pareja con “No surprises”, con la que, paradójicamente, nos tomaron por sorpresa. Ya no bajaría la intensidad, pues siguieron, en este orden, “Jigsaw Falling Into Place”, “Lucky (“¡no no no, no me hagas estoo!” gritan el par de fans a mi lado). “Reckoner”,  “Optimistic”,  “Idioteque” (con un intro que nos hizo bailar, ya sin complejos); por si fuera poco, “Fake Plastic Trees”, las oleadas de olor a mariguana se hacen cada vez más frecuentes. ¡Qué setlist, carajos!

El primer encore.  El público quiere más. Los de arriba corean “Radiohead,  Radiohead”. Abajo ya he visto pasar varios vasos volando, derramando algún líquido. “¡Ahí va el agua!”

Después de la pausa, regresan con “Videotape” y sí, es verdad, se arrancan con una esperada  “Paranoid Android” que sacude a simples mortales, fans y ultrafans. Da tiempo hasta de bailar un poco de slam o hacerle al cuento.  Le sigue una nueva favorita: “House of cards”, interpretada con mucho feeling (I don’t want to be your friend, I just want to be your lover, no matter how it ends, no matter how it starts).  Momento para darse cuenta que los ojos rojos no son producto de la rinitis alérgica, de la contaminación ni de la resequedad de la fría noche.  Aún no me recuperaba cuando comienza a escucharse el arpegeo de “My iron lung”, la favorita (mía). Momento cumbre, piel china. Hora de cantar y brincar sin parar y recordar los melancólicos noventas (Faith, you’re driving me away, you do it everyday, you don’t mean it but it hurts like hell). Cuando regreso de la Tierra del Chocolate  volteo a ver a los demás, pero todos parecen estar atónitos ante lo que oyen y ven. Hasta ahora todo ha sido perfecto – les digo- . El “no mames, no mames” de los compañeros de junto se hace ya casi sistemático y es que la selección de temas no nos ha dejado descansar un momento. Prueba de ello fue la siguiente canción: “Street Spirit (fade out)”, himno del disco “The bends”.

11.40 p.m. Segundo encore. Hora de tomar aire. Algunos dudan sobre si regresarán al escenario. Otros de la sección General B, aprovechan para comenzar a salir del Foro,  pues el metro sólo funcionará hasta las 12:00 a.m.

Vuelven, y en forma de “Pyramid Song”.  Para dejar huella (más),  lanzan  cordel y anzuelo  hacia otra fibra sensible del pasado: “Just”. En ese momento quizá era mucha la mariguana que nos había llegado de abajo o en verdad la banda había logrado conectarse por completo con todos los asistentes (o eso parecía). Era frecuente ver sonrisas entre desconocidos y esa extraña sensación de hermandad quizá propia de los lugares más recónditos de la sección naranja B.

Como todo ciclo en la vida, deciden cerrar una noche inolvidable dejando todas las emociones en su lugar (“Everything is in right place”) en este caso dejando todo listo para el siguiente día. Con la difícil tarea de superar lo hecho en un excelente primer concierto, cargado de emotividad y esa sensación de que alguien ha jugado con tu alma.

 

Segundo round.

“¿Y estos son los lugares VIP?” fue lo primero que pensamos Wilberth y yo al llegar a unos lugares en las gradas, lejos. Un concierto muy diferente (no menos bueno que el primero). Visto desde otro ángulo,  más cerca pero en otro ambiente,  unos fans más elitistas, ahora en medio de dos ultrafans. Fui yo el que se aventó la puntada de decirle a Wilt que éste era un concierto para verdaderos fans (no me considero uno) al percatarme que me era más difícil identificar canciones que en el primero y darme cuenta de que se trataba de un setlist muy diferente, lo cual me pareció más que bien. Aún uno de los megafans a mi lado no lograba identificar con precisión las rolas con el sonar de las primeras notas y confundió una que otra.

 

DSCF5067 por ti.

Foto: Wiberth Herrera. Desde la mentada zona VIP

 

Para el segundo concierto variaron desde el inicio. La primera novedad vino de la mano de  “Kid A”, seguida de un coro de 55 mil personas a la voz de “Karma Police”, emblema de la banda y que tantos referentes ha dado a los amigos.

Un poco más adelante, apareció la cruda “Talk show host” y  “You and whose army” a la que Wilt me ayudó a entender la letra para disfrutarla mejor.  Un punto cumbre sin duda fue “Jigsaw falling into place” que nos puso a todos a brincar. Nuevamente comenzó a correr a los alrededores el olor a hierba.

Si alguien quedó insatisfecho con el setlist del primer concierto, seguramente fue retribuido en el segundo con pesos pesados como “Climbing up the walls”, “How to disappear completely” (para verdaderos fans, con todo y explicación de Wilberth del origen de la rola) y, por supuesto, “The Bends” que hizo estallar en euforia a los nostálgicos.

Quizá uno de los momentos que más serán recordados y debatidos de este segundo round  fue cuando interpretaron la versión “fallida” de “Exit music (for a film)”, en donde decidieron interrumpir dos veces la canción; la segunda, de manera definitiva con un  Thom Yorke explicando: “la dejamos para después”.  Algunos aseguran que sí se equivocaron; otros afirman que fue una broma que ya habían hecho en otros conciertos.  Quise pensar que decidieron apelar a lo dicho por Gwyneth Paltrow  al presentarlos en la entrega de los Grammy: “Con ustedes: una banda que nunca se equivoca”.

Además de “Dollars and Cents” y “Like Spinning Plates”  en la parte final del concierto, la verdadera sorpresa fue, desde luego, “Creep” que provocó que todos se vieran a la cara para decirse “¡no puede ser, no puede ser! Aún quienes -antes del concierto- pedían que no la tocaran, la cantaron como en las épocas de la prepa. No pudo ser sino emotivo el momento. Pensé que los de la banda quizá habían visto la reseña del diario Reforma en donde mencionaban que no habían tocado “la canción con la que se dieron a conocer en México”.  Agarró a todos por sorpresa, menos a Wilberth, quien segundos antes dijo en el inter “van a tocar Creep” porque la habían tocado en España y en Chile días antes. (Lo curioso fue que Radiohead aún no se había presentado en Chile). Ya no supe a quién creerle pues, entre la euforia, Emilio comenzó a gritar que no la tocaban desde hacía 10 años (días después le bajó a 8).  Como anécdota, al escucharse los primeros acordes de “Creep” pude ver levantarse con mucho esfuerzo a un asistente que, a medio concierto, había desfallecido debido a una baja de presión por la “emoción” y a quien sus amigos no habían podido hacer reaccionar con nada. Ver su cara de incredulidad mientras intentaba ponerse de pie me hizo pensar que estábamos presenciando un momento único de la última gran banda sobre la tierra.

 

Video del momento de “Creep”

 

 

Al final, la avalancha de gente abandonando el Foro Sol, la mayoría con una sonrisa de satisfacción en sus caras. No alarms and no surprises.

 

Setlist Concierto 1

1. 15 Step
2. Airbag
3. There There
4. All I Need
5. Nude
6. Weird Fishes/Arpeggi
7. The Gloaming
8. National Anthem
9.  Faust Arp
10. No Surprises
11. Jigsaw Falling Into Place
12. Lucky
13. Reckoner
14. Optimistic
15. Idioteque
16. Fake Plastic Trees
17. Bodysnatchers


Pausa 1:

18. Videotape
19. Paranoid Android
20. House of Cards
21. My Iron Lung
22. Street Spirit (fade out)


       Pausa 2:

23. Pyramid Song
24.- Just
25. Everything Its Right Place

 

           Setlist  Concierto 2

 

01. 15 Steps
02. There there
03. The National Anthem
04. All I Need
05. Kid A
06. Karma Police
07. Nude
08. Weird Fishes/Arpeggi
09. The Gloaming
10. Talk Show Host
11. Videotape
12. You and Whose Army?
13. Jigsaw falling into Place
14. Idioteque
15. Climbing up the Walls
16. Exit Music (For a Film)
17. Bodysnatchers

       Pausa 1:


18. How to Disappear Completely
19. Paranoid Android
20. Dollars and Cents
21. The Bends
22. Everything in Its Right Place

 

 

Pausa 2:


23. Like Spinning Plates
24.
Reckoner
25. Creep

 

Comentarios y  frases:

 

Al vapor:

 

“Qué cosa la de hoy, es lo más mágico que he visto en la vida después de coger mujeres. ¡Qué setlist! Los vi a 4 metros, literalmente”.

(E.N.P.) Asistente en la sección general A, saliendo del primer concierto.

 

“Un concierto que abre la conciencia por dos puertas. Ejecución perfecta y show visual importante” (15/03/09).  Ericel Vásquez, Diálogos Postmodernos.

 

"¡No mames, lo imposible sucedió, lo imposible sucedióooo!" (gritando mientras lloraba, cuando tocaban “Creep”). Gabriela Aguilar, Diálogos Postmodernos.

 

“¡Wow!, la vida. El mejor concierto por mucho. Grandes Yorke y compañía. No hay quejas, sólo agradecimientos. Para mí, un necesario e inusual (spring) break: D.f., los cuates, mercancía pirata y Radiohead. ¿Qué más quieres en la vida?”

 Fernando Manzanilla, Diálogos Postmodernos.

 

 

Ya más digerido:

 

Lunes: la increíble sensación de estar en un momento único y que después cuando leyeras las reseñas de los periódicos no dieras crédito de que estuviste ahí, bailando "Idioteque" o lloriqueando porque "Karma Police" te tomó por sorpresa (como nos toma el amor, el coraje o la tragedia). Y cada nueva canción corroborar que escuchabas a -quizás y solo quizás- la mejor banda sobre la tierra y que no los veías a destiempo o siendo tú y ellos unos viejos de mierda, sino verlos ahí en el escenario, en estado de gracia (ambos, tú, ellos, hasta el tipo de al lado que te prestó los binoculares o el que encendió el primer cigarro de mota). Entonces comprendes que la música a veces llega como un marcatexto sobre las líneas de nuestra biografía. Y no olvides esa fecha: 16 de marzo de 2009.

Eduardo Huchín, Tediósfera y Pildorita de la Felicidad.

 

 

*Nota: Para una reseña completa del segundo concierto y desde otro ángulo, dale click al siguiente enlace:  http://pildoritadelafelicidad.blogspot.com/2009/03/radiohead-solo-porque-lo-sientes.html

 

mexicosoundcheck por ti.

Foto: www.radiohead.com

 

10 comentarios

Fernando -

Jajaja. Suele pasar. Sucede hasta en las mejores bandas.

Quedará para la historia como aquella del que se regresó en reversa desde champotón.

Eduardo Huchín -

PEGO EL COMENTARIO QUE DEJÓ UN AMIGO DESDE CHILE (SIN ALBUR):

Bueno, acá tocaron el 26 y 27 de marzo. Acá en Santiago de Chile, quiero decir. La cosa fue que, jejeje, todo hubiera pasado normal de no haber sido porque, como en la mayoría de las veces, el coño sur siempre sorprende a propios y extraños. No voy a quemar a mi compa, pero es una muy buena fuente.

Va. Luego de los conciertos en Río de Janeiro, el 22, creo, en Brasil, la banda se fue a echarse unos drinks en Ipanema pal relax y a ver qué garotinha salía moviendo sus caderas para cantarle: “oh, qué cosa más linda, tan llena de gracia…”. En esas andaban cuando se toparon con unas morras chilenas que también estaban cotorreando por ahí. Turista tú, turista yo, se armó la charla y después de algunos jijijijeos ellas les preguntaron que si habían ido al concierto de Radiohead. Vergas. Imagínense la cara de estos vatos. Mínimo un trago de cachaza pal susto y para el azore. Chale. Obvio dijeron que sí y no mintieron. ELLOS habían estado en el concierto. Las morras, siguiendo con la charla, les preguntaron que qué les había parecido y ellos dijeron que bien, chido, nais, fain fain fain, very gud, very gud,very gud, veryveryverygud. Doble chale. Es que no mames, imagínate estar cotorreando con estos vatos, tsss!!!

En fin. Ahí no paró la cosa. A esas alturas cualquiera ya hubiera reconocido a estos pelados, pero no, ellas no. Triple chale. Siguió el cotorreo y entonces les preguntaron que qué onda, que si pensaban ir a Chile. Estos weyes dicen que sí, que tienen planeado hacer una escala acá en Chile, en Santiago, y ahí es donde viene el chale cuádruple: las morras les dicen, “es que tenemos boletos para los conciertos de Radiohead en Chile, pero como andamos de vacaciones pues no vamos a poder ir; se los vendemos, para que no se pierdan las entradas y que vayan ustedes al concierto”.

No mamaaaaaaaaaaar!!!!! No, simplemente no, no, no, no y no! Va contra natura, las leyes de la física no lo permiten, es algo insólito! O al menos, como dice Condorito -chileno, por cierto- PLOP! o mejor aún: EXIJO UNA EXPLICACIÓN!

La nota que salió en la prensa: http://www.radioheadchile.com/2009/03/radiohead-en-tvn/#more-586

Eduardo Huchín -

Wil: las expresiones "cómo te avasallaron" y "cómo te tocaron" son metafóricas, o eran parte de los privilegios de la zona VIP???

Por cierto, todo viaje encierra una historia... cualquier viaje y eso es lo chido.

Fernando Manzanilla -

Por cierto se me olvidaba, ya está lista la segunda parte de la reseña de Wilberth sobre los conciertos de Radiohead y Anneke en México.

Así que píquenle y chequen:

http://losviajesdewilberth.blogspot.com/2009/03/radiohead-una-bella-bruja-llamada.html

Fernando Manzanilla -

Gracias por los comentarios Wilt, creo eres la persona a quien más hago referencia y con justa razón. Aún con lo de Chile para nada perdiste credibilidad. Imposible perderla cuando te aventaste todas las rolas de principio a fin y conoces las historias de ellas.

En cuanto a lo de FANS, para nada me quito la chamarra, ni aún la que se quedó en el puesto afuera del Foro Sol. Imposible cuestionar la evolución y originalidad de estos HDP.

Digamos que soy fan nivel "washa, washa" (saludos Ericel) en proceso de más.
Me gusta y compro los discos la banda desde hace más de una década y nunca han dejado de sorprenderme, pero (inexplicablemente) por una u otra razón no me he adentrado a peinar todas las letras (que son más que excelentes) y me he ido más de lado de la música. Aun tengo pendiente urgar y disfrutar varias rarezas y lados B que le dan todavía un ingrediente extra.
Pero alguien me enseñó que no hay prisa. Como les dije a varios: esta es una banda que amerita además de la euforia de un concierto, sentarse a degustar y volar.
Después de este concierto reafirmé lo que ya sabía: No hay mejor banda en este momento que Radiohead.

wilberth -

excelente post, fernando. Se nota cómo te avasallaron en el primer concierto, y cómo te tocaron en el segundo. Creo que así será siempre. Uno no puede querer a los dos hijos por igual pero hombre, cómo preferir a uno y que desaparesca el otro.

Es verdad, mi credibilidad se desmoronó con lo de chile, pero sólo eso. Lo demás, fue verdad. jeje. I am FANS!! Tú también eres fan, no te quites la chamarra.

Fernando Manzanilla -

Eduardo, ¿A qué típo de viajes te refieres? ;)

Así fue Mussgo. El olor venía de muchas partes. Otro tipo de viajes.

Jajaja. Ericel, es verdad, el washa washa estuvo a la orden del día. Ya tradicional recurso cuando traicionan las ganas de cantar.

Peco de injusto al no nombrar ni agradecer a toda la banda que compartió la experiencia del viaje y los conciertos. A todo el contingente Mérida - Oaxaca - Campeche. Algunos no puedo mencionar sus nombres porque los quemaría en su trabajo pero todos sabemos que valió la pena arriesgar el pellejo.

Especiales agradecimientos a U.V. y a don Memo, quienes nos llevaron a comer unos tacos con sabor a gloria a las 2 de la mañana.

A U.V. nuevamente por guiarnos el segundo día y por su atinada recomendación para desayunar en el Moro. Esos excelentes tacos, los churros y el chocolate fueron otra experiencia. ¡Gracias!

Ericel -

Escuchar a radiohead fue vivir un pedazo de historia... y aunque yo cante washa washa... todas las canciones estuvieron poca madre

Mussgo -

El olor a mariguana se sentía incluso caminando hacia le foro sol.

Eduardo Huchín -

Ese solo detalle de Emilio: "hace diez años que no la tocaban" y "al otro día le bajó a 8" lo define a la perfección. Jajaja. Cuando los conciertos hacen necesarios los viajes, qué más se puede pedir.